Muchas civilizaciones antiguas de Meso América, desarrollaron calendarios escritos precisos, y de estos el calendario de los mayas, el cual es el más sofisticado. Su precisión se deriva del hecho en que se basa una cuenta continua e ininterrumpida de los días (llamados Kin en maya) a partir de un día cero inicial. A lo largo de la historia los pueblos han sentido la necesidad de contar con un punto fijo, donde pueden iniciar sus cálculos del tiempo. Con este fin, generalmente se ha determinado el punto inicial o evento histórico (el nacimiento de Nuestro Señor Jesucristo) por un evento hipotético (la fecha de la creación del mundo). Los mayas también descubrieron la necesidad de tal fecha y así, probablemente usando un evento astronómico significativo, el cual fue el 13 de agosto de 3114 a.C.
Los Mayas consideraban que los seres humanos somos seres espirituales experimentando la ‘vida’ en el planeta Tierra. Ellos eran profundos estudiosos del Universo y sus investigaciones dejaron como legado 23 calendarios de los cuales el Tzolkin o Calendario Sagrado Maya, es el principal.
El calendario Maya, es la trascripción de la secuencia de la evolución del espíritu. Podemos imaginarlo como un mapa que indica el recorrido para la evolución del espíritu. Conecta el día a través de las energías, viviendo el aquí y ahora. Representa el patrón de evolución; el calendario solar-lunar (femenino y masculino) tiene la función de lograr nuestra evolución estando siempre en sincronía con nuestro espíritu y universo. Este calendario, es un calibrador de energías capaz de relacionar eras históricas, lecturas astronómicas y astrológicas, llegando puntualmente a cada ser humano para señalarle su destino cósmico.
Los Mayas observaban con una expansión de conciencia superior a la nuestra, las energías que nos llegan desde el centro de la Galaxia a través del Sol y la información en forma de símbolos en el Tzolkin o como se conoce comúnmente, Calendario Sagrado Maya.
El Calendario Sagrado Maya consta de 260 kines (rangos de frecuencia de las ondas de energía) emitidas desde el centro de nuestra Galaxia, que nos llegan a través del Sol y por las cuales somos transitados diariamente. Estas energías, al penetrar el mundo de lo humano, configuran en este las 20 modalidades que los Mayas consideraron “dioses solares”, y que expresaron mediante 20 imágenes que hacen las veces de “sellos” o “glifos”. Cada uno de estos rangos de frecuencia modula en 13 “tonos”.
Los “kines” (frecuencia de energía) expresan los diferentes grados de evolución alcanzado por el Espíritu en ese momento del tiempo galáctico e interactúan con las características personales de cada uno, estimulando la progresiva germinación y crecimiento de nuestra naturaleza espiritual. Esto sucede de una manera autónoma, en un todo independiente de nuestra voluntad, porque el día de nuestro nacimiento, al desprendernos del organismo materno e iniciar nuestra propia vida, entramos “en fase” con la configuración energética de la Galaxia de ese día (kin equivale a día).
Entonces, a partir de nuestro nacimiento y obedeciendo al principio de la atracción universal, irán siendo atraídos hacia nosotros los elementos, las personas y por supuesto las experiencias que vayan configurando nuestro crecimiento espiritual.
El conocimiento ancestral del calendario, guiaba la existencia de los mayas a partir del momento de su nacimiento, y era muy poco lo que escapaba a la influencia calendárica. Sabemos que los mayas llevaban varias cuentas calendáricas independientes de los Kin que estaban sincronizadas, siendo las de 260 y 365 días más importantes. Las cuentas mayas de los días se escriben combinando números con glifos. Los primeros veinte números mayas se escriben así:
El calendario de 260 dias- Tzolkin
El calendario Tzolkin de 260 días es el más usado por los pueblos del mundo maya. Lo usaban para regir los tiempos de su quehacer agrícola, su ceremonia religiosa y sus costumbres familiares, pues la vida del hombre maya estaba predestinada por el día del Tzolkin que correspondía a la fecha de su nacimiento. Esta cuenta consta de los números del 1 al 13 y 20 nombres para los días representados, asimismo por glifos individuales. Al llegar al decimocuarto día, el número del día regresa al 1 continuando la sucesión del 1 al 13 una y otra vez. El día 21 se repite la sucesión de los nombres de los días y así sucesivamente. Ambos ciclos continúan de esta manera hasta los 260 días sin que se repita la combinación de número y nombre pues 260 es el mínimo común múltiplo de 13 y 20. Los glifos y los nombres de los Kin o días son:
EL CALENDARIO DE 365 DÍAS HAAB
El calendario llamado Haab, se basa en el recorrido anual de la Tierra alrededor del Sol en 365 días. Los mayas dividieron el año de 365 días en 18 “meses”, llamados Winal de 20 días cada uno y 5 días sobrantes que se les denominaba Wayeb. Cada día se escribe usando un número del 0 al 19 y un nombre del Winal representado por un glifo, con la excepción de los días del Wayeb que se acompañan de números del 0 al 4. Los glifos y nombres de los Winal o meses mayas son:
EL CICLO DE 18,980 DÍAS- LA RUEDA CALENDÁRICA
La combinación de los calendarios de 260 y 365 días, crea un ciclo mayor de 18,980 días (el mínimo común múltiplo de 260 y 365), a esta combinación se le ha llamado la Rueda Calendárica. Sus cuatro elementos (numeral-glifo Kin y numeral-glifo Winal) juntos solo se repiten cada 18,980 días. Una gran cantidad de monumentos mayas solamente registran la fecha de la Rueda Calendárica. Aquí se ven los cuatro elementos de la Rueda Calendárica para el Wuinal maya llamado Pop que corresponde a las fechas del 7 al 26 de abril del año 2000 y el primer día del siguiente Winal maya llamado Uo.
Este método de fecha se ilustra en la inscripción del dintel 16 de Yaxchilán, Chiapas, México que reproducimos aquí.
La “cuenta larga” o “serie inicial”
Los mayas también llevaban una cuenta de los días transcurridos a partir de una fecha que ellos determinaron como el inicio de la era maya actual. A esta cuenta se le denomina la “Cuenta Larga” o “Serie Inicial”.
De acuerdo a la correlación Goodman-Martínez-Thompson (GMT) 584,285, la cuenta larga actual tiene su fecha inicial el 13 de agosto de 3,114 a. C. del calendario Gregoriano.
Según la Cuenta Larga el inicio del año 2001 se expresa como lo muestra esta Estela Maya personalizada que realiza el Centro de Estudios del Mundo Maya.