El nopal no solo es símbolo de nuestra identidad nacional, también es una tradición en la alimentación y más recientemente en el cuidado preventivo de la salud. Se dice que fue quien salvó a los aztecas de morir de hambre y sed cuando emprendieron su viaje en busca de un lugar para fundar su ciudad, a la que nombraron Tenochtitlán, “sitio del nopal que crece sobre la piedra”.
El nopal es parte fundamental de la cultura y de la alimentación del mexicano, este ha salvado a diversas partes del país del hambre y de la falta de alimentos. México es afortunado por el espacio que ha podido destinar a los plantíos y por la alta producción de este vegetal. Cerca del 40% de las especies del continente crecen en nuestro suelo.
A mediados del Siglo XX, cuando aumentó la población y la demanda del nopal verdura (única especie sin espinas, de tallos pocos fibrosos y para consumo humano). México es el principal productor a nivel mundial.
La ventaja es que los nopales han generado estrategias adaptativas y pueden sobrevivir a las sequías. La mayoría de las especies carecen de agua, sus hábitats son regiones áridas y semiáridas donde no se puede cosechar otra verdura, indudable virtud ya que más del 45% del territorio mexicano tiene esta característica.
Esta verdura tiene frutos conocidos como tunas o tunos, estos son de sabores dulces o amargos dependiendo de la maduración. Son ricos en vitaminas, minerales y se le atribuyen propiedades medicinales, como lograr reducir la glucosa en la sangre.
A los nopales también se le atribuyen propiedades no solo nutrimentales, sino anticancerígenas, antidiabéticas, para el control de peso y como una excelente fuente de calcio. Por ello, se han comercializado diversos productos derivados del nopal como cápsulas, harinas, tortillas, jugos y otras mercancías industrializadas.
Producción en México
México es el país con mayor diversidad y producción de nopales en el mundo, de las más de 300 especies de nopal, en México hay más de 100 del género opuntia; por tanto, podría ser el centro de origen por las grandes cantidades que habitan las zonas semiáridas.
México tiene la mayor producción de nopal verdura en el mundo. Produce 600 mil toneladas al año; la Capital es líder tan sólo con la aportación de 280 mil de la Delegación Milpa Alta.
El nopal verdura es el principal cultivo del DF; su producción ocupa un área aproximada de 4 mil hectáreas, produce de 60 a 70 toneladas; en 2011 se tenían registrados 5 mil productores.
Estados Unidos exporta nopal por la alta demanda que ejercen los mexicanos emigrados. California, Nueva York y Chicago son las principales ciudades del llamado “consumo de la nostalgia”.
El 75% del nopal es comestible, entre los nutrientes que más aporta son: calcio, hierro, proteínas, carbohidratos y ácido ascórbico, entre otros.
