Te dejamos cuatro lugares que pocos conocen para que deleites tu paladar con los sabores típicos y no tan típicos de San Miguel de Allende.
San Miguel de Allende se caracteriza por sus bellos colores coloniales, su arquitectura única y también por su deliciosa gastronomía. Por eso, año tras año esta ciudad recibe millones de turistas nacionales e internacionales, que buscan vivir experiencias mágicas. Además de ser un destino con muchos encantos escondidos, también tiene sorpresas culinarias. Por eso, te compartimos algunos de los secretos gastronómicos de San Miguel de Allende. Si estás planeando visitarlo y quieres probar delicias artesanales, que no son muy populares entre los turistas, ¡pruébalos todos!
Neopolitan Pizza
Si quieres darte un verdadero lujo en el paladar, no puedes dejar de probar las pizzas artesanales de Neopolitan Pizza. Además de hacerlas en horno de piedra y con los mejores ingredientes, son verdaderamente un manjar que vas a disfrutar. Son perfectos para degustarlas en la tarde en la terraza y acompañarlas con una cerveza artesanal.
Café de la Parroquia
Aquí encontrarás la tradición de San Miguel de Allende. Además de tener los ingredientes más frescos y un servicio del personal excelente, el Café de la Parroquia es ideal si quieres disfrutar de un delicioso desayuno o comida. Asimismo, cuentan con una gran variedad de platillos tradicionales que te encantarán.
Lolita Cocina Mexicana & Bar
En este lugar podrás encontrar una amplia diversidad de platillos, la mezcla de las delicias mexicanas y la cocina internacional. También te recomendamos este lugar para ir con amigos o pareja. Además, es perfecto para disfrutar una tarde con buena comida y bebidas deliciosas.
Luna de Queso
Aquí vas a encontrar comida nutritiva y muy rica. Ofrece una mezcla de ingredientes frescos como granos, nueces, vegetales, queso de excelente calidad y pan hecho de manera artesanal. Además, tortillas hechas a mano y muchos más platillos con preparación artesanal. Es ideal para una cita o tarde con amigos o para pasar a refrescarte en el lugar.